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“Jesús, expresó claramente los principios que debían guiar a los predican la verdad y enseñan el evangelio del reino”1765, los cuales hoy más que nunca debemos tener presente, para que nuestro celo, jamás nos impida ver la verdad, donde quiera que ella esté, evitando así caer en el fanatismo destructor que vemos en tantas iglesias y religiones, que en defensa de sus dogmas permiten la muerte entre los hermanos, a quienes sólo deberían amar.

“Resumidos y expresados en fraseología moderna, estas son sus enseñanzas: “Respetad siempre la personalidad del hombre.  Una causa recta no se ha de avanzar jamás por la fuerza,  las victorias espirituales, sólo se pueden alcanzar mediante el poder espiritual.  Esta amonestación contra el empleo de influencias materiales, atañe tanto a la fuerza psíquica, como a la fuerza física.  No se deben emplear argumentos avasalladores ni superioridad mental para obligar a los hombres y a las mujeres a entrar en el reino.  La mente del hombre no debe ser aplastada por el sólo peso de la lógica ni sobrecogida por la elocuencia sagaz” 1765.

“Yo os digo: cuidaos del fermento de los fariseos y los saduceos, no os engañéis por su exhibición de su gran conocimiento y por su profunda lealtad a las formas de la religión. Preocupaos solamente por el espíritu de la verdad viviente y el poder de la verdadera religión” 1745.

“Aunque no se puede eliminar del todo la emoción, como factor en las decisiones humanas, los que quieran avanzar la causa del reino, no deben apelar directamente, a las emociones en sus enseñanzas”1765, porque “la emoción por sí sola es una conversión falsa, le hace falta tanto la fe, como el sentimiento. En cuanto tal movilización de lealtad humana permanezca incompleta, hasta ese punto, la experiencia de la conversión será una realidad mezclada de lo intelectual y lo espiritual” 1099.

“Apelad directamente al espíritu divino que habita en la mente de los hombres.  No recurráis al temor, la piedad ni al mero sentimiento.  Al apelar a los hombres, sed justos, ejerced autocontrol y exhibid discreción.  Mostrad respeto adecuado por la personalidad de vuestros alumnos.  Recordad que Yo he dicho: he aquí que llego a la puerta y golpeo, si alguien me abre, Yo entraré”1765, porque “Esta presencia espiritual de la divinidad, no es caprichosa ni arbitraria, su variante experiencial es inherente a la dote del albedrío de las criaturas personales” 159.

“Jesús tenía una visión muy amplia, Él amonestaba a sus seguidores a que predicaran el evangelio a todos los pueblos.  Estaba libre de toda estrechez de mente.  Su corazón comprensivo abrazaba la humanidad entera, aun más, al universo.  Su invitación siempre era: “Quien quiera que lo desee, que venga” 1102.

Por eso “al atraer a los hombres al reino, no disminuyáis ni destruyáis su autorrespeto.  Aunque un excesivo autorrespeto de sí mismo puede llegar a destruir la humildad y culminar en orgullo, vanidad y arrogancia, la pérdida del respeto propio lleva a menudo a una parálisis de la voluntad.  Es propósito de este evangelio, restaurar el autorrespeto en los que lo han perdido y controlarlo en los que lo tienen.  No cometáis el error de limitaros a condenar las equivocaciones en la vida de vuestros alumnos, recordad que también debéis reconocer generosamente las cosas dignas de alabanza de sus vidas” 1765.

“Es la bondad misma de Dios la que conduce a los hombres a un arrepentimiento verdadero y genuino.  El secreto de vuestro autodominio está ligado con vuestra fe en el espíritu residente, que siempre labora por amor” 1610.

“Comprender a nuestros hermanos, entender sus problemas y aprender a amarlos, es la suprema experiencia de la vida”,  “porque ningún hombre es extraño para aquel que conoce a Dios”.  “ En la experiencia de encontrar al Padre en el cielo, descubres que todos los hombres son tus hermanos”1431. “Jesús amó a los hombres como hermanos, reconociendo al mismo tiempo, como diferían en dones innatos y cualidades adquiridas” 1102.

Por lo tanto “cuidad de no herir el respeto propio de las almas temerosas y miedosas.  No empleéis el sarcasmo con mis hermanos de mente sencilla.  No os mostréis cínicos con mis hijos dominados por el temor.  El ocio destruye el  respeto a sí mismo, por lo tanto advertid a vuestros hermanos que se mantengan ocupados en su tarea de elección y esforzaos por asegurar trabajo a los que se encuentran sin empleo” 1795.

“No cometáis el error de utilizar tácticas despreciables como por ejemplo, la de intentar por medio del terror, que los hombres y mujeres entren al reino.  Un padre amante no aterroriza a sus hijos para conseguir que obedezcan sus exigencias justas”1766.  “La más original de la enseñanzas de Jesús fue el énfasis en el amor y la misericordia en lugar del temor y el sacrificio” 1102.

“Alguna vez comprenderéis los hijos del reino, que las sensaciones fuertes de emoción no equivalen a la guía del espíritu divino.  Si se siente una fuerte y extraña emoción en pos de hacer algo, o de ir a cierto lugar, no significa esto necesariamente, que tales impulsos se originen en el espíritu residente”1766.  “El entusiasmo místico sin frenos y el éxtasis religioso desencadenado, no son credenciales de la inspiración, ni supuestamente credenciales divinas” 1000.

“Advertid de antemano a todos los creyentes, que habrán de atravesar un mar de conflictos al pasar de la vida como se la vive en la carne, a la vida mas elevada como se le vive en el espíritu.  Los que moren exclusivamente en uno de los dos medios, sufrirán muy poco conflicto o confusión, pero  todos están destinados a experimentar mayor o menor confusión, pero todos están destinados a experimentar mayor o menor inseguridad en los tiempos de transición entre los dos niveles del vivir.  Al entrar al reino no podéis escapar de sus responsabilidades ni evitar sus obligaciones, pero recordad que el yugo del evangelio es fácil y la carga de la verdad es ligera” 1766.

“Encontráis difícil recibir mi mensaje, porque queréis construir las nuevas enseñanzas directamente sobre las viejas pero Yo os declaro, que debéis renacer.  Debéis comenzar nuevamente como niñitos y estar dispuestos a confiar en mis enseñanzas y creer en Dios.  El nuevo evangelio del reino, no puede ser amoldado a lo que ya existe” 1576.

“El mundo está lleno de almas que se mueren de hambre en la presencia misma del pan de la vida, los hombres mueren buscando a Dios, sin ver que Él mora dentro de ellos.  Los hombres van en pos de los tesoros del reino, con el corazón anhelante y los pies cansados, sin ver que esos tesoros están al alcance inmediato de la fe viviente.  La fe, es para la religión, lo que la vela es para la nave, es aumento de poder, no una carga adicional en la vida.  Para los que entran en el reino, la lucha es una sola, ganar la batalla contra la duda y la incredulidad” 1766.

“La creencia llega al nivel de la fe, cuando motiva la vida y da forma a la manera de vivir.  La aceptación de una enseñanza como verdadera no es fe, es meramente creencia, tampoco es fe la certidumbre ni la convicción.  Un estado mental llega a los niveles de fe, tan sólo cuando domina efectivamente la manera de vivir.  La fe es un atributo vivo de la experiencia religiosa personal y genuina”.  “La creencia es siempre limitadora y astringente, la fe en cambio es expansiva y liberadora.  La creencia fija, la fe libera” 1114.

“Las creencias pueden volverse posesiones de un grupo, pero la fe ha de ser siempre personal.  Se pueden sugerir creencias teológicas a un grupo, pero la fe puede únicamente surgir en forma individual, en el corazón del creyente” 1114.

“Al predicar el evangelio del reino, estáis enseñando simplemente, la amistad con Dios.  Y esta amistad apela por igual a hombres y mujeres, porque ambos encontrarán en ella, lo que verdaderamente satisface sus anhelos e ideales propios. Decid a mis hijos que aunque me enternezca por sus sentimientos y tenga paciencia con sus debilidades, también soy despiadado con el pecado e intolerante con la iniquidad.  Soy en verdad manso y humilde en la presencia de mi Padre, pero soy igual e implacablemente inexorable allí donde haya maldad deliberada y rebelión pecaminosa contra la voluntad de mi Padre en el cielo” 1766.

“Enseñad a todos los creyentes que no se apoyen en las tablas inseguras de la falsa (auto)compasión.  No podéis desarrollar caracteres fuertes si os entregáis a compadeceros a vosotros mismos.  Intentad honestamente evitar la influencia  engañosa de compartir pesares.  Ofreced vuestra compasión a los valientes y valerosos, limitando vuestra piedad por aquellas almas cobardes que tan sólo enfrentan a medias las pruebas del vivir.  No brindéis consuelo a los que sucumben sin luchar.  No ofrezcáis simpatía a vuestros semejantes son el sólo objeto de conseguir que ellos a su vez simpaticen con vosotros” 1766.

La falsa compasión muchas veces es dañina, porque le impedimos a la persona desarrollar sus energías ocultas, para solucionar sus problemas.  Cada lucha, cada derrota, acrecienta la destreza, la fuerza, la habilidad y la confianza que nos ayuda a avanzar y ser mejores.  Si uno huye de los obstáculos o tratamos de evitárselos a los demás, estamos echando a perder el futuro pues “sólo los que se enfrentan con los hechos y los adaptan a los ideales, pueden llegar a la sabiduría” , porque “la vida será una carga pesada a menos que aprendas a enfrentar los fracasos con donaire” 1779.

“Enseñad a todos los creyentes que los que entran en el reino no se vuelven inmunes a los accidentes del tiempo ni a las catástrofes ordinarias de la naturaleza.  El creer en el evangelio no prevendrá los problemas, pero sí asegurará que vosotros actuaréis sin miedo cuando los problemas ocurran.  No os prometo liberaros del mar de las adversidades, pero si os prometo que navegaré con vosotros, en todas ellas” 1767.

“No describáis a vuestro Maestro como varón de dolores.  Las futuras generaciones deben conocer también nuestra felicidad radiante, el entusiasmo  de nuestra buena voluntad y la inspiración  de nuestro buen humor:  Proclamamos un mensaje de buenas noticias que es contagioso en su poder transformador. Nuestra religión late con nueva vida y nuevos significados.  Los que aceptan esta enseñanza se llenan de alegría y su corazón los impulsa a regocijarse para siempre.  Una felicidad en crecimiento constante es la siempre la experiencia de todos los que están seguros de Dios” 1766. 

“La felicidad y el regocijo se originan en la vida interior.  No puedes experimentar verdadero regocijo completamente solo.  Una vida solitaria es fatal para la felicidad.  Aun las familias y las naciones disfrutarán más de la vida, si la comparten con otros” 1220.

¡ Contenta, Señor contenta ¡, porque tengo la certeza que me amas y porque yo estoy empeñada en amar a mis hermanos como Tú, a mí me amas.....