ÍNDICEEl libro de Urantia Edición1999
ESCRITO 138 LA FORMACIÓN DE Los MENSAJEROS DEL REINO
1538:1 138:0.1 DESPUÉS de predicar el sermón sobre "el Reino", Jesús reunió a los seis apóstoles aquella tarde y empezó a exponerles sus planes para visitar las ciudades situadas alrededor y en las proximidades del Mar de Galilea. Sus hermanos Santiago y Judá estaban muy molestos porque no habían sido llamados para participar en esta conferencia. Hasta ese momento se habían considerado como pertenecientes al círculo interno de los asociados de Jesús. Pero Jesús había decidido no tener parientes cercanos entre los miembros de este cuerpo de directores apostólicos del reino. El hecho de no incluir a Santiago y a Judá entre los pocos elegidos, así como su aparente alejamiento de su madre desde la experiencia de Caná, fue el punto de partida de un abismo cada vez más profundo entre Jesús y su familia. Esta situación continuó durante todo su ministerio público —los suyos llegaron casi a rechazarlo— y estas diferencias no desaparecieron por completo hasta después de su muerte y resurrección. Su madre oscilaba constantemente entre actitudes de fe y esperanza fluctuantes, y emociones crecientes de desilusión, humillación y desesperación. Sólo Rut, la más joven, permaneció inquebrantablemente fiel a su padre-hermano.
1538:2 138:0.2 Hasta después de la resurrección, toda la familia de Jesús participó muy poco en su ministerio. Un profeta siempre recibe honores, excepto en su propia tierra, y siempre goza de una estima comprensiva, salvo en su propia familia.