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CAPITULO III
PRIMERA SÍNTESIS: DIOS EL SUPREMO
La Emergencia del Ser Supremo
Síntesis en el Nivel Creativo de Existencia
El Gran Universo Completado
Asociación Creativa de Deidad-Dual
El Hijo y el Espíritu en la Segunda Edad
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En este punto en nuestro estudio, estamos pasando del pasado y el presente, hacia el futuro del tiempo. En muchas partes de estudio subsiguiente, sin embargo, puede ser conveniente tratar eventos corrientes como si ellos fueran cuentos presentes. Nosotros creemos en ocasiones, usar el tiempo presente para narrar a acontecimientos que son corrientes en el capítulo concerniente; en el mismo contexto, hablaremos de capítulos más recientes en el tiempo pasado; y de los últimos capítulos en el tiempo futuro. Esta adaptación del tiempo presente no será seguida uniformemente, porque hay algunas situaciones en que sería completamente inoportuno.
Parece razonable suponer que hay “un tiempo quieto” entre las edades universales, así como hay una “zona quieta” entre los niveles espaciales adyacentes. Si este es el caso, entonces podemos considerar propiamente que la plena obtención del destino evolucionario al final de la segunda edad, sin complicar este estudio teniendo que contar con cuentos que tienen que ver con las fases de apertura de la próxima edad.
Durante este “tiempo quieto”, al cierre de la presente edad universal, el gran universo está experienciando la satisfacción del crecimiento completo-el logro del destino.
El largo esfuerzo y fatiga evolucionaria finamente a triunfado por medio de la victoria experiencial. Los Creadores Supremos han conocido el reto de la perfección de Havona, y el resultado final de 700.000 universos locales perfeccionados que culminan en el establecimientos de los siete superuniversos en Luz y Vida.
En cierto sentido, las creaciones espacio-temporales están “descansando en sus remos”. Para la duración de este tiempo quieto el gran universo es una creación auto contenida y auto-suficiente, algo como Havona en la Primera Edad. Este es el tiempo cuando los Creadores y criaturas pueden experimentar la dulzura de las metas logradas. Esta es la pausa momentánea en el crecimiento eterno de la creación, cuando la satisfacción reemplaza el esfuerzo, y la consumación (por el momento) toma precedencia sobre el nunca finalizado reto del crecimiento. El gran universo entero está haciendo una pausa en el tiempo para consolidar sus logros y para completar su unificación bajo la nueva soberanía de la recientemente emergida Deidad Experiencial de la existencia finita – El Ser Supremo.
1. LA EMERGENCIA DEL SER SUPREMO
El evento que trae la Segunda Edad Universal al cenit y culminación de todo el crecimiento finito es la emergencia final del Ser Supremo como gobernante experiencial de los universos perfeccionados. Esto significa que esta hasta ahora inaccesible Deidad se ha vuelto accesible y contactable por todas las criaturas este encuentro debe ser fructífero y satisfactorio tanto para la Deidad como para las criaturas. Dios el Padre es infinito y siempre será un misterio para nosotros, pero Dios el Supremo es finito y es por lo tanto comprensible para las criaturas finitas. Puesto que todas las criaturas finitas han evolucionado con y dentro de esta Deidad finita, hay un parentesco experiencial real y factual que sirve como base para la mutualidad de comprensión.
La Deidad Suprema. En este punto en nuestro estudio estamos encontrando un nuevo nivel de función de la Deidad Total. Hemos estado haciendo cuidadosas notas de estos niveles cuando los homos encontrado. Primero tomamos nota del nivel estático luego nivel potencial y el nivel asociativo, y luego los niveles creativo y evolucional. Ahora estamos en un punto donde podemos examinar el sexto nivel – el nivel supremo.
Los siguientes tres niveles son precreativos: estático, potencial y creativo. Ellos podrían asemejarse a los niveles en que la Deidad “desplegó” y preparó para la aventura de expansión en el tiempo y en el espacio.
Los siguientes dos niveles son salientes: creativo y evolucional. En estos niveles Dios (La Deidad) está distribuyéndose así mismo a toda la creación; él está revelándose a los universos; él está expandiéndose hacia fuera en los reinos post-Havona; él está entrando en sociedad con sus criaturas-realmente identificándose con algunos de ellos a través de la residencia de su espíritu, el Ajustador. Las actividades de la Deidad en estos niveles salientes son, quizás, mejor reveladas en el ministerio de Dios el Séptuplo.
Ahora, en el sexto nivel, el nivel Supremo, observamos una entrante-una reunión de la que ha servido en toda la creación. El Supremo es la primera gran síntesis, el reunidor de la tesis de perfección y la antítesis de imperfección – imperfección que, por crecimiento evolucionario ha adquirido un estado perfeccionado. En este nivel aún la Deidad es experiencial. En este nivel Dios y el hombre pueden volverse uno, como en la naturaleza de los Hijos de Dios Paradisíacos (Vea Apéndice VI. Sec. 1. Un Análisis de los Siete Niveles de Función de la Deida Total.)
UN RETRATO SIMBOLICO DE LOS SIETE ESPIRITUS RECTORES
| I | El Padre Universal |
| II | El Hijo Eterno |
| III | El Espíritu Infinito |
| IV | El Padre-Hijo |
| V | El Padre-Espíritu |
| VI | El Espíritu-Hijo |
| VII | El Padre-Hijo-Espíritu |
2. SÍNTESIS EN EL NIVEL DE EXISTENCIA DE LA CRIATURA
Por difícil que sea visualizar estos eventos del futuro remoto, podemos en principio examinar el mismo tipo de síntesis que está teniendo lugar ahora mismo con respecto a ciertas criaturas. Hemos anotado que Havona proporciona la tesis original de perfección; la antítesis de esto es la imperfección de los superuniversos, y esta imperfección original puede hacerse perfecta por medio del crecimiento evolucionario. ¿Podemos ahora encontrar un ejemplo de la síntesis de lo perfeccionado y lo perfecto en niveles de las criaturas?
Estas síntesis podrían tener lugar entre dos criaturas en la unión trinidizantes de un finalista y un nativo de Havona (250:5) ¿Puede el lector pensar de alguien más distinto de un nativo perfecto de Havona que algún sucio y desaseado morador cavernícola en algún planeta primitivo? Y aún, ese humano primitivo puede ser residido por un Ajustador, podría exhibir hambre de perfección, podría sobrevivir ascender al Paraíso, y ser llamado al Cuerpo de la Finalidad. Y como un finalista, podría unirse a un nativo de Havona en la aventura de trinidización, y, unión experiencial actual (bio-unificación espiritual) con ese nativo de Havona. Esto sería una síntesis muy literal de lo perfeccionado y lo perfecto.
Pero siempre habrá una diferencia entre la naturaleza perfecta de existencia eterna, y la naturaleza perfeccionada de logro experiencial. La actitud del (perfecto) Havonero posiblemente podría expresarse como, ¿”si las criaturas trabajan, siempre trabajan, por qué sería diferente? La actitud del (perfeccionado) ascendentero podría expresarse como”, las criaturas trabajan porque hemos aprendido a hacerlo trabajando, y era muy diferente.
3. EL GRAN UNIVERSO COMPLETADO
Durante todo el largo periodo de crecimiento evolucionario en la Segunda Edad, cada superuniverso ha desarrollado totalmente su propio crecimiento, bajo la única influencia de uno de los Espíritus Rectores. Estos Siete Espíritus rectores son únicamente diversos en naturaleza debido a que personalizan las siete combinaciones posibles (singulares y plurales) de las tres Deidades del Paraíso. En la ilustración anterior hemos simbolizado la naturaleza única de cada Espíritu rector por la disposición de tres círculos. Estos tres círculos están dibujados de tal manera que hay siete áreas – tres áreas donde no hay superposición, tres áreas donde hay una doble superposición, y, un área que tiene una triple superposición. Este es un razonablemente buen símbolo para los Espíritus Rectores, así como los tres círculos concéntricos son un magnífico símbolo para las Tres Personas de la Deidad en, y como, la trinidad del Paraíso.
Divergencia y convergencia. Cada Espíritu Rector es único en naturaleza. Puesto que cada Espíritu impregna y domina el entero medio ambiente de un superuniverso, resulta que cada superuniverso y sus seres nativos también son únicos – ellos son para siempre marcados con la naturaleza y características individuales del Espíritu Rector Supervisor. Cada superuniverso también tendería a desarrollar su propia cultura distintiva, su propia “civilización” única.
Con la emergencia del Ser Supremo como el soberano de todos los superuniversos, las barreras que separan las supercreaciones durante la Segunda Edad van a ser removidas. Luego, por primer vez todos siete puede empezar a funcionar como una sola unidad, como un todo administrativo y cultural.
Esta entremezcla de todas las siete culturas debe resultar en un nuevo estímulo de crecimiento, crecimiento en términos de la segunda edad. Nosotros identificaríamos esta transacción como una buena ilustración del principio de divergencia y convergencia. El crecimiento es primero estimulado a volverse individualista y distintivo por convergencia, y luego, en la plenitud del tiempo, todo lo que ha desarrollado en relativo aislamiento es reunido y consolidado.
Este es un paralelo interesante a la que pasa en el desarrollo de un mundo habitado normal. Primero, las razas evolucionarias son estimuladas a divergir, a llevar sus caminos separados. Mientras así aislados cada raza tiende a desarrollar su propia cultura y civilización única. Después en el desarrollo planetario todas las razas y culturas son mezcladas con los pueblos Adánicos y la civilización Edénica.
(Vea Apéndice IV. Sec. 5-B Los Superuniversos en Luz y Vida; Sec. 6-A Los Universos Locales en Luz y Vida; Apéndice XIV Sec. 1. El Principio de Divergencia-Convergencia; Sec.3 Administración Superuniversal: Presente y Futura)
4. ASOCIACIONES CREATIVAS DE LA DEIDAD DUAL
Hemos anotado el principio de divergencia y convergencia. Nosotros debemos prestar atención, en este punto, de otro principio. Ciertas asociaciones creativas de la Deidad-Dual parecen ser de principal importancia en algunas de las edades universales.
En la Primera Edad, la asociación significativa de la Deidad-Dual fue la del Padre-Hijo. La unión del Padre-Hijo trinidiza el Espíritu Infinito y eternaliza el universo central de perfección.
En la Segunda Edad la asociación significativa de la Deidad-Dual parece ser la asociación del funcionamiento del Hijo y el Espíritu. Estamos informados que el Espíritu sostiene la misma relación con el Hijo en las creaciones post-Havona que el Hijo sostiene con el Padre en la creación central. Pero, la cooperación activa entre el Hijo y el Espíritu no parece estar teniendo lugar en el Paraíso así como en los universos en la colaboración de los Hijos Creadores y los Espíritus creativos – los creadores, organizadores, y perfeccionadores de estos dominios evolucionarios.
El resultado de la asociación Padre-Hijo es la aparición del Espíritu Infinito y Havona. ¿Cuál será el resultado final de la consumación de 700.000 asociaciones de Hijo-Espíritus en el tiempo y en el espacio? (Vea Apéndice V. La Deidad – Dual en las Edades Universales.)
5. EL HIJO Y EL ESPIRITU EN LA SEGUNDA EDAD
El cuento que culmina la Edad Cero e inicia la Primera Edad Universal es la unión trinidizante del Padre y el Hijo que produce el Espíritu Infinito y el universo central de perfección. Estamos informados que en la Segunda Edad el Espíritu tiene las mismas relaciones con el Hijo que el Hijo tiene con el Padre en la Primera Edad. Si este es el caso, ¿qué resultará de tal asociación Hijo-Espíritu? ¿Esto significa algún nuevo enlace entre el Hijo Eterno y el Espíritu Infinito en el Paraíso? Creemos que no. La asociación observable entre el Hijo y el Espíritu no esta realizándose en el Paraíso; está realizándose aparentemente en el tiempo y en el espacio y en los universos locales. El Hijo y el Espíritu Paradisíacos están entrando en relaciones en las personas de sus Hijos y Espíritus universales – los creadores y organizadores de los universos locales.
La unión Padre-Hijo es una relación existencial, y es un evento eterno que tiene lugar en el Paraíso. Las uniones de Hijos-Espíritus son relaciones experienciales y son eventos temporales que tienen lugar en el espacio. La asociación de la Deidad-Dual de la Segunda Edad podría resultar en la unión trinidizante de 700.000 Hijos y Espíritus universales, algún día siguiendo el establecimiento de todos los universos locales en Luz y Vida. Pero el episodio trinidizante que inicia la Primera Edad probablemente no encontrará su análoga hasta el cierre de la Segunda Edad. No es hasta muy al final de la Segunda Edad que los universos locales habrán adquirido un estado perfeccionado que es (finitamente) comparable con la perfección eterna de la creación central.
La evolución de los Hijos Creadores. Si retrocedemos de nuevo a la Edad Cero, podeos observar que el Hijo Eterno es un ser plenamente personal antes de los tiempos de Havona. Un Hijo Creador es también un ser plenamente personal antes que su universo local sea aún comenzado, mucho menos establecido en Luz y Vida. Esto significa que el entero crecimiento evolucionario de Michael, aún su experiencia y capacitación precreadora, es como un ser personal.
Un Hijo Creador Séptuple, un Michael Mayor, es experiencialmente mucho más de lo que él fue cuando primero apareció en el Paraíso como un nuevo Hijo Creador del Padre Universal y el Hijo Eterno. En este trabajo de organización y perfección de su universo local, él ha experienciado mucho. En su séptimo autootorgamiento en la semejanza de sus criaturas él a sumado mucho a su naturaleza que no era una parte de su dote original de divinidad paradisíaca.
Un Michael mayor aún personifica esas tesis original e individual de divinidad que estaba justamente concebida por el Padre e Hijo Paradisíaco, y que le dio origen. El ha agregado a esta dotación original toda su naturaleza experiencial que abarca la antítesis de divinidad paradisíaca, porque es extraída de la imperfección evolucionaria de las creaciones espacio-temporales. Un Michael Mayor ha tenido con las imperfecciones inherentes en el crecimiento evolucionario de sus propias criaturas; él sabe lo que es ser como una criatura; su compleja y compuesta naturaleza incluye la naturaleza de la criatura-aún como José Ben José aun vive en Michael de Nebadón . En esta síntesis personal de estas cualidades opuestas (antitético) tal Michael Mayor se vuelve semejante a, y es expresivo de, la divinidad experiencial del Ser Supremo. El Ser Supremo es la síntesis-Deidad finita de una personalidad espiritual original de perfección de Havona más la soberanía experiencial lograda de los siete superuniversos-la imperfección evolucionada en un estado perfeccionado.
B) La Evolución de los Espíritus Creativos. Si retornamos una vez más nuevamente a la Edad Cero podemos observar que el Espíritu Infinito no es aún una personalidad, y que el Espíritu obtiene estado de personalidad funcionando como un creador cooperativo en la actualización de Havona. Una Hija Creativa del Espíritu Infinito, un Espíritu Creativo gana estado de personalidad en igual manera trabajando como un creador cooperativo en la perfección de un universo local.
El mandato (sin crecimiento súbito y eterno) de la aparición de Havona es un evento de la eternidad, y el Espíritu Infinito logra igualmente estado de personalidad como un evento simultáneamente eterno con la aparición de la perfecta Havona. La perfección evolucionaria de un universo local es un evento del tiempo y su espíritu creativo igualmente logra estado de personalidad como un evento del tiempo cuando su universo local (y, quizás todos los otros) sean establecidos en Luz y Vida. De ese modo, cada ser creativo se parece al universo y adquiere estado de personalidad en la creación de este universo.
Todo esto significa que la capacitación y la temprana experiencia en el universo local del Espíritu Creativo son como seres personales. En este aspecto, su crecimiento evolucionario es muy distinto de las experiencias de crecimiento personal de los Hijos Creadores asociados. (Vea Apéndice VIII Sec. 6-A Una Comparación: El Espíritu Infinito y los Espíritus Creativos.)
El actual límite de crecimiento de un Espíritu Creativo parece ser la sexta etapa de ser. Este espíritu maduro es experiencialmente bastante diferente de un colega de quinta etapa, uno que solo se ha diferenciado dentro del Espíritu Infinito en respuesta al concurrente nacimiento del Hijo Creador complementario. El crecimiento de los hijos del universo aumenta las naturalezas experienciales de las criaturas espacio-temporales a la dotación de divinidad paradisíaca. El crecimiento de un espíritu del universo aumenta la experiencia de lograr personalidad experiencial en el tiempo-de personalizar la focalización original del Espíritu Infinito que es la presencia segregada de un nuevo Espíritu Creativo.
C) La Unión Hijo-Espíritu. Nunca desde que el Padre Universal y el Hijo Eterno Unidos en la Trinidización del Actor Conjunto han producido dos creadores un tercer ser que es su igual en naturaleza creativa y atributos de creador. La unión tridinizante de los Hijos y Espíritus del universo deben probablemente esperar el cierre de la Segunda Edad o aún el comienzo de la Tercera. Probablemente no tendrá lugar hasta que todos los 700.000 universos locales hayan sido establecidos en Luz y Vida.
La unión tridinizante de los Hijos Espíritus Universales transformaría su asociación de Deidad-Dual en una relación triuna-el dúo se volvería un trío por la aparición de un tercer ser coordinado un creador asociado de estado coordinado. Hemos elegido llamar esta asociación triuna un “El Trío Creativo de Hijos-Espíritus”. El creador asociado recientemente aparecido sería expresivo de:
1) La dote original de divinidad paradisíaca del Hijo Creador y el Espíritu Creativo.
2) La experiencia de organizar y perfeccionar un universo local por parte del Hijo y el Espíritu universales.
3) La naturaleza de criatura experiencia que el Hijo Creador ha adquirido en el curso de sus siete autootorgamientos.
4) El estado de personalidad experiencial del Espíritu Creativo que ella ha adquirido en el tiempo como creador coordinado.
5) La “consecuencia supersumativa de la unión de la unión” del Hijo Creador y el Espíritu Creativo.
Este tercer ser podría estar “provisionalmente subordinado en soberanía pero (podría) en muchas formas (ser) el más versátil en acción”. Este Creador Asociado bien podría revelar atributos de naturaleza Supremo-Ultima. Nosotros prevemos que los Tríos Creativos del Hijo-Espíritu van a jugar una parte importante en la apertura del Nivel Espacial Primario y en el futuro desarrollo de todos los universos del espacio exterior.
(Para referencias a los Documentos en apoyo de esta sección, vean Apéndice V. Asociaciones de la Deidad-Dual; Apéndice VIII Sec 6-A La Personalización de una Focalización; Apéndice XIII, La Evolución de los Hijos y Espíritus del Universo.)
LA HISTORIA ABSONITA
Esta es la historia de la evolución de los universos del espacio exterior. Es también la historia del crecimiento continuado del gran universo y de la futura unificación de este universo con las creaciones espaciales exteriores bajo la soberanía de Dios el último.
Esta historia se cuenta en seis capítulos:
Capítulo IV Universos Nuclear y Citoplasmáticos
Capítulo V La Transformación de la Síntesis
Capítulo VI La Segunda Tesis Creativa
Capítulo VII La Segunda Antítesis
Capítulo VIII Magnitudes del Universo Maestro
Capítulo IX Segunda Síntesis: Dios el Ultimo
Esta historia comprende las siguientes cuatro edades universales. Empieza con la invasión del primer nivel del espacio exterior. Termina con el crecimiento completado del universo maestro y la emergencia final de Dios el Ultimo.
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