ÍNDICEEl libro de Urantia Edición1999
ESCRITO 176 EL MARTES POR LA NOCHE EN EL MONTE DE Los OLIVOS
1912:1 176:0.1 ESTE martes por la tarde, cuando Jesús y los apóstoles salían del templo para ir al campamento de Getsemaní, Mateo llamó la atención sobre la estructura del templo, y dijo: "Maestro, observa el aspecto de estos edificios. Mira las piedras macizas y los hermosos adornos; ¿es posible que estos edificios vayan a ser destruidos?" Mientras continuaban hacia el Olivete, Jesús dijo: "Estáis viendo estas piedras y este templo macizo; en verdad, en verdad os digo que en los días que pronto llegarán, no quedará piedra sobre piedra. Todas serán derribadas." Estas observaciones que describían la destrucción del templo sagrado despertaron la curiosidad de los apóstoles mientras caminaban detrás del Maestro; no podían concebir ningún acontecimiento, como no fuera el fin del mundo, que pudiera ocasionar la destrucción del templo.
1912:2 176:0.2 Para evitar las multitudes que pasaban por el valle de Cedrón hacia Getsemaní, Jesús y sus compañeros tenían la intención de subir la pendiente occidental del Olivete durante una corta distancia, y luego seguir un sendero que conducía a su campamento privado, situado cerca de Getsemaní, a corta distancia por encima del campamento público. Cuando se desviaban para abandonar el camino que conducía a Betania, contemplaron el templo, glorificado por los rayos del sol poniente; y mientras se detenían en el monte, vieron aparecer las luces de la ciudad y contemplaron la belleza del templo iluminado; y allí, bajo la suave luz de la luna llena, Jesús y los doce se sentaron. El Maestro conversó con ellos, y Natanael hizo enseguida la pregunta siguiente: "Dinos Maestro, ¿cómo sabremos que esos acontecimientos están a punto de suceder?"