El
hecho esencial de la Primera Edad es la unión del Padre y el Hijo en un acto trinidizante
el cual produjo el fenómeno gemelo de la aparición eterna del Espíritu Infinito
y del Universo Central de Havona. Similarmente, los frutos finales de la Segunda
Edad Universal deberán resultar en la aparición en el tiempo de los setecientos
mil universos locales, mas alguna clase de trinidizaciòn de los Espíritus e Hijos
de los universos locales. Lo que inicia la primera Edad Universal será algo que
se reflejará al final de la segunda edad universal.
Hemos
sido instruidos que en la creación del universo local, el espíritu sostiene con
el hijo la misma relación que el Hijo sostiene con el Padre en la creación del
Universo Central. ¿Significa esto una nueva relación entre el Hijo Eterno y el
Espíritu Infinito en el Paraíso?. Yo diría que no; su sociedad creativa no está
siendo consumida en el Paraíso sino en el tiempo y el espacio. Así que la unión
del Hijo y el Espíritu debería darse en el tiempo y en el espacio y en las personas
del Hijo Creador y el Espíritu Creativo.
La
unión Padre-hijo es existencial en la eternidad. La unión de los Hijos y Espíritus
es experimental en el tiempo y el espacio. No el solo el reflejo de las funciones
asociativas y creativas de la deidad, sino también de la función de la deidad
en el nivel evolutivo. Un Maestro Michael es mas en edad que cuando apareció por
primera vez en el Paraíso como hijo del Padre Universal y del Hijo Eterno. En
sus experiencias de auto otorgamiento, ha adquirido mucho que no estaba en su
creación como divinidad. Un sexto estado del Espíritu Creador (tan lejos como
puede desarrollarse en la edad universal presente) en una Madre Espíritu de universo
local, diferente del Espíritu Creativo inicial quien se diferenció del Espíritu
Infinito como una respuesta que repercute al nacimiento concurrente del Hijo Creador
asociado.
Una
unión real de los Hijos y Espíritus del universo será expresión, no solo de su
divinidad paradisíaca original sino también de su soberanía ganada por experiencia.
La consecuencia de la trinidizaciòn de tal unión Hijo-Espíritu, podrá así , ser
una expresión de supremacía experimental y puede resultar en la aparición del
potencial para la función absonita en la aparición de los nuevos tríos creativos
de Hijo-Espíritu y su colega trinidizado que podría ser llamado Supremacía Creativa.
En
la producción de Havona, el Espíritu Infinito, alcanza realidad como una Deidad
personal. En la producción de un universo local parecería que como si el Espíritu
Creativo también alcanzara status de no-cualificado como un creador personal.
Y si esto es cierto, ella podría empezar con la aventura del tiempo como un ser
personal no-cualificadamente. Una Espíritu Creativo está ganando su status como
un creador personal por su participación en la creación del universo local. Esto
es exactamente como su divina madre, el Espíritu Infinito, gana status de personalidad
como la Tercera Persona de la Deidad. El Espíritu Infinito alcanza tal status
por su participación en la creación del universo central. Pero el Espíritu Infinito
del tipo de Deidad intermitente-en-el-tiempo; el Espíritu Creativo es del tipo
de Deidad que llega-a-ser en el tiempo, una personalidad creativa.
Si
regresamos a la Edad Cero, podemos observar que el Hijo Eterno fue un ser plenamente
personal aun "antes" de que Havona hubiera sido creada. También el Hijo Creador
es un ser plenamente personal antes de que su universo local haya sido creado
-mucho menos establecido en luz y vida. Su creador asociado será también un ser
plenamente personal cuando la aventura de creación del universo local esté completa,
cuando el Hijo y el Espíritu universales,
hayan cumplido con las instrucciones del Padre de venir aquí, al tiempo y espacio
y por la técnica de la evolución (creación en el tiempo) dupliquen el patrón del
universo central de eternidad, sobre una base cuantitativa porcentual -un universo
con don diez millones de mundos habitados en contraste con el universo central
de mil millones.